Seguramente te haya sucedido alguna vez que, al pasar la lengua por los incisivos, has notado un levísimo movimiento de las piezas dentales que ibas tocando. Si tienes cierta tendencia hacia la obsesión, es posible que hayas ido corriendo a un espejo para comprobar que todo está bien, y, fijándote mucho, hayas podido ver que los dientes se mueven.
Si el movimiento es ínfimo, no tienes que preocuparte por nada. Los dientes tienen un movimiento natural casi imperceptible, necesario para que las piezas puedan soportar algunos traumatismos sin partirse de raíz.
Al igual que los edificios preparados contra los terremotos, la configuración dental que nos provee la naturaleza, está preparada para evitar la pérdida de piezas a la primera de cambio.
Si, en cambio, es fácilmente visible que los dientes se mueven, debes acudir a un dentista.
A continuación, te contamos los casos que pueden producir movimiento en las piezas dentales:
Otras causas de los dientes que se mueven
Bruxismo
Esta condición, asociada al estrés y la ansiedad, se define como hecho de apretar la mandíbula y, por consiguiente, los dientes unos con otros. Esto hace que la base de los mismos se debilite y acaben cayendo.
También puede ocurrir que las piezas se rompan.
Traumatismo
Un golpe siempre es motivo de preocupación. Por supuesto, hay muchos tipos de golpes, pero lo que se reciben en la dentadura pueden afectar a los dientes por la inflamación o rotura de alguna parte de la zona afectada.
Periodontitis
Que también es conocida como piorrea, ataca a los tejidos y partes estructurales que rodean los dientes.
Para detectar esta enfermedad a tiempo, debes acostumbrarte a ir cada seis meses al dentista y, para evitarla, debes tener una correcta higiene dental.
Esperamos que este artículo te haya tranquilizado, o bien te haya alertado para ir al dentista.
